Aquella tarde del 13/02/2011 después de comer apresuradamente una hamburguesa en un conocido establecimiento y rodar las secuencias de los paseos de Eddie y Lucía, nos encaminamos hacia lo que sería nuestro siguiente SET de rodaje. En este caso, una casa abandonada que un familiar me había proporcionado para el rodaje.
Cuando llegamos allí y examinamos el lugar, pensamos en lo difícil que sería rodar.
El frio penetraba por cada una de las ventanas y puertas, que abiertas o rotas nos ofrecían una estupenda temperatura ambiente. Yo tenía frio, pero me consolaba egoístamente al pensar que en unos minutos habría personas en peores condiciones que yo. Antonio Esquinas (Eddie) y Laura Alcocer (Lucía) deberían de rodar varias secuencias en ropa interior.
No tardamos en hacernos con un pequeño calefactor y una gruesa manta para aligerar sus penurias. Entre toma y toma, cubríamos sus cuerpos desnudos con la manta y encendíamos el calefactor.
Pronto, comenzamos a tirar planos y planos y planos hasta que la noche se hizo con el día. Y fue entonces cuando llegó el momento de grabar la escena más importante de la tarde. La escena de cama...
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